Tacto afectivo y erótico
¿Qué puede pasar en una sesión de terapia manual conmigo?
Lo que más distingue mi aproximación de los masajes tradicionales es:
1- Tú guías el tacto que quieres recibir para tu propio disfrute. Puede ser describiéndome de antemano como quieres que se desarrolle la sesión, o puede ser en un dialogo activo entre nosotrxs. Siempre vamos a explorar unas dinámicas previas para entrar en confianza mutua.
2- Todas tus emociones y expresiones están bienvenidas. Tu placer está bienvenido, y también tus lagrimas. ¡El cuerpo emocional nos puede sorprender! Tus sonidos, movimientos, y reacciones están bienvenidos.
Como educadorx sexual somáticx, la mayoría de mi trabajo tanto en mis talleres que en el acompañamiento individual se enfoca en apoyar a las personas a desarrollar más conexión con sus sensaciones, con ejercicios de percepción corporal, de movimiento, de respiración y de juego/exploración. Otra manera de conectar con sus sensaciones es recibiendo tacto deseado. La mayoría de mi formación en educación sexual somática fue el currículo completo (y extendido) de Sexological Bodywork. En los extensivos cursos 3 y 4, cuales son los más importantes del programa, aprendí a dar masajes eróticos y extaticos, masajes anales, trabajo pélvico interno, sanación de tejido cicatricial, “desarmar” tensión genital, todo ello dentro de un contexto informado sobre el trauma y como se presenta en el cuerpo. Pueden leer más sobre ello aquí en español y en ingles.
Este enfoque particular de masaje erótico dirigido por lx cliente, que puede involucrar tacto genital y anal, me parece poderoso; sin embargo, es algo que casi nunca he llegado a hacer con las personas que acompaño en educación sexual somática. Mi experiencia trabajando con personas LGBT es que en general, quieren explorar temas relacionados a la intimidad, y nuestro trabajo en conjunto se trata más de ellxs mismxs con su propio cuerpo. No he llegado a conocer personas que llegan, listxs para que les toque, sin tabús personales o sociales. También me he sentido limitadx por la idea del masaje, donde solo podría tocar a cuerpos con mis manos. De las experiencias más profundas que he vivido dando acompañamiento en educación sexual somática que involucran tacto, son sesiones donde me pidieron que les cucharea, que les abrace, que me abracen; tacto que podría describir como más afectivo que erótico.
Creo profundamente que todxs tenemos derecho a ser tocadxs; que no todxs tienen el mismo acceso al tacto; y que el tacto sana. Y que no hay nada malo en pagar para que nos toquen, en este mundo imperfecto y capitalista donde hacemos lo que podemos para llenar nuestras necesidades.
Todo mi trabajo tiene que ver con la intimidad. Etimológicamente, “intimidad” significa “lo más adentro, lo más interno”; cuando permitimos abrirnos a lo más interno, creo que salimos transformadxs. Para mí, trabajar con la intimidad es un proceso muy amoroso y sagrado que implica vulnerarse, dejarse ir adentro, y salir transformadxs. Cuando vi la película “Good Luck To You, Leo Grande”, sobre un trabajador sexual que tiene una clienta mayor que nunca tuvo un orgasmo, sentí que mi trabajo estaba representado en esta película. Aunque no tengo sexo con clientes, me sentí totalmente identificadx con el proceso de acompañamiento, de ofrecer una presencia compasiva y un contenedor seguro como lo vemos en la película.
Me parece importante enfatizar que la educación sexual somática viene del trabajo sexual, y que mi propia experiencia como trabajadorx sexual informa totalmente mi práctica. Trabajé como stripper en el verano del 2019. Antes y después, realicé otros tipos de trabajo sexual virtual, como camming, Onlyfans y venta de contenido, pero ser stripper fue mi primer trabajo sexual presencial. Todavía tenía muchos prejuicios hacía los clientes, había internalizado discursos sobre qué tipo de hombres eran clientes de trabajo sexual. En el strip club más iconico de Montreal, el Café Cléopatre, descubrí que muchos de estos hombres eran muy solos y buscaban contacto humano y afectivo. Me acuerdo del hombre que, en las cabinas privadas, me pidió un abrazo (en Montreal, todo el dinero que haces como stripper es dando bailes con contacto en cabinas privadas). Me acuerdo de mis dos clientes regulares, que venían específicamente a verme, que pagaban canción tras canción en la cabina mientras platicábamos, yo sentadx encima de ellos. Uno era un hombre ya grande y muy solitario; el otro era un alumno de doctorado extranjero que no había encontrado su lugar en la ciudad aún. Descubrí que quizás 50% del trabajo sexual es sexual, y el otro 50% es emocional y de cuidados. Ser trabajadorx sexual me ha vuelto una persona más empática.
Puedes agendar tu sesión enviándome un correo a [email protected]
Cuidados de cicatrices
Otro servicio que ofrezco y que me apasiona muchísimo es el cuidado de cicatrices. Una parte de mi formación en educación sexual somática se enfocó en eso, y me sorprendió todo lo que aprendí. Para hacer una historia muy breve, el tejido cicatricial, que crece después de cirugías, heridas, y a veces incluso inflamación y golpes, es un tejido conectivo que se desarrolla con fibras distintas a las que crea el cuerpo sin cicatrices. Puede causar adherencias, es decir varias capas de tejidos se quedan pegadas en vez de resbalarse las unas con las otras (por ejemplo, después de una cesárea, se quedan pegados el musculo uterino, la fascia y los músculos abdominales), y también puede causar cambios en las sensaciones, como ausencia de sensaciones y dolor. Si quieren saber más sobre el tejido cicatricial, hablo más de ello en mi clase grabada La sagrada pelvis. En lo personal, me voló totalmente la cabeza saber que muchas personas con vulva tienen cambios en sus sensaciones por cicatrices pélvicas o genitales después de partos vaginales, cesáreas, o cirugías, y que nadie atiende estos cambios enfocándose en el placer.
La medicina occidental tiene pocas soluciones para el tejido cicatricial, pero se puede trabajar muy bien con terapia manual. En Montreal, me pude reunir con dos colegas de educación sexual somática, y una masajista que tiene una formación en trabajo de cicatrices, para hablar de nuestras técnicas tocando cicatrices. Sigo aprendiendo con cada cicatriz que toco, y me apasiona seguirlo haciendo.
¿Qué tipos de cicatrices he atendido?
- Mastectomías afirmativas de género
- Cicatrices genitales
- Vaginoplastia afirmativa de género
- Cicatrices pélvicas por cirugía de embarazo ectopico
- Mastectomía e implantes por causa de cáncer de seno
Además del aspecto físico, la terapia manual de cicatrices puede generar muchas emociones y muchos recuerdos, lo cual me parece importante explorar en un contenedor seguro para integrar estas experiencias. Incluso para cicatrices de cirugías de afirmación de género, es muy común tener emociones contradictorias, como euforia y duelo, comodidad y desconexión al mismo tiempo. Otra vez, todo eso está bienvenido en el espacio que ofrezco.
Puedes agendar tu sesión enviándome un correo a [email protected]
Trabajo pélvico
La pelvis es una estructura muy importante en el cuerpo, siendo el centro de gravedad, la articulación entre las piernas y el tronco, conteniendo nuestros órganos digestivos y sexuales. También guarda mucha tensión y fisiologicamente, muchas emociones se pueden somatizar como tensión pélvica. Considero que nos falta educación y cuidados hacía nuestra pelvis!
Es muy común tener dolor pélvico, lo cual puede limitar nuestra experiencia del placer y bienestar sexual. Este dolor puede tener causas fisiológicas, como tejido cicatricial después de partos, abortos, abusos sexuales, o infecciones; causas estructurales como postura, musculatura pélvica debilitada o tensa, adherencias cicatriciales en el abdomen; o causas emocionales/psicosomáticas como vergüenza, tabús sociales relacionados a la sexualidad (a veces inconscientes), duelos, etc.
El trabajo pélvico que ofrezco siempre empieza sin tacto, compartiendo ejercicios, explicaciones anatómicas, y consciencia corporal. Puede ayudar a disminuir el dolor pélvico, incrementar el placer genital, y soltar emociones.
Es distinto a la reeducación o rehabilitación del piso pélvico porque
1- Abordamos el placer, un tema que se queda silenciado en espacios de fisioterapia por lo regular, aunque involucra los órganos genitales;
2- Nunca hay tacto pélvico o genital con dolor, molestia o incomodidad, lo cual también es lamentablemente común en la rehabilitación del piso pélvico.
Puedes agendar tu sesión enviándome un correo a [email protected]
Precios :
$1000mx por sesión de una hora/$1800mx por sesión de 2 horas (+IVA si requiere factura)
La accesibilidad es un valor fundamental de mi práctica. La mayoría de las personas con las que trabajo son personas LGBTQ+. Si tienen interés en mis servicios y no les son accesibles, por favor pregunten a [email protected]
Para agendar una llamada de introducción sin costo conmigo, para hablarme de lo que estás buscando y ver si te puedo acompañar, envíame un correo a [email protected]